En el séptimo episodio de Se Vale Preguntar abordamos un tema que muchas nos hemos preguntado alguna vez: ¿Qué es una vulva saludable y cómo se supone que debe lucir? La Dra. Yarí Vale y la trabajadora social Johana Karis desmitifican las percepciones comunes sobre la diversidad y salud de nuestras vulvas.
¿Qué es la Vulva?
Para comenzar, es crucial entender qué es la vulva. Muchas personas confunden la vulva con la vagina. La vulva es la parte externa, mientras que la vagina es el canal interno que conduce al cérvix y al tracto genital superior. Esta confusión es común y se ve exacerbada por la falta de educación sexual adecuada. La vulva es la parte externa de los genitales femeninos, compuesta por varias estructuras:
- Monte de Venus: La parte superior donde se encuentra el vello púbico.
- Clítoris: Una de las principales fuentes de placer sexual.
- Labios Mayores: Los labios externos, generalmente más gruesos y carnosos.
- Labios Menores: Los labios internos que rodean la abertura vaginal.
- Introito: La entrada a la vagina.
- Perineo: El área entre la entrada vaginal y el ano.
- Uretra: Por donde se expulsa la orina desde la vejiga al exterior.
- Glándulas: Como las glándulas de Bartolino y las glándulas de Skene, que ayudan en la lubricación.
La Influencia del Porno y los Estereotipos
La pornografía ha creado una imagen irreal de cómo debería verse una vulva, llevando a muchas personas a sentirse inseguras. Es importante recordar que cada vulva es única. No existe un “tipo” de vulva ideal. La diversidad en color, tamaño y forma es completamente normal y saludable.
Señales de una Vulva Saludable
Para determinar si una vulva está saludable, es vital realizar autoexámenes regulares. Una vulva saludable no debería presentar:
- Picazón: Puede ser un signo de infección o irritación.
- Hinchazón: Podría indicar una infección o una reacción alérgica.
- Úlceras o Enrojecimiento: Podrían ser signos de infecciones o condiciones dermatológicas.
- Dolor: En la vulva o durante las relaciones sexuales.
Cuidado de la Vulva
El cuidado adecuado de la vulva es sencillo y no requiere productos especiales. Aquí algunos consejos:
- Evitar Desodorantes y Perfumes: Estos pueden irritar la piel sensible de la vulva.
- Duchas Vaginales: No son recomendadas ya que pueden alterar el pH natural y causar infecciones.
- Ropa Interior de Algodón: Es la mejor opción para mantener la vulva seca y evitar la irritación.
- Evitar Pantyliners: Estos retienen humedad y pueden causar infecciones.
- Cuidado al Depilarse: Si decides depilarte, hazlo con cuidado para evitar irritaciones y mantener algo de vello púbico para protección.
Cuándo Consultar a un Profesional
Es importante consultar a un profesional de la salud si notas:
- Picazón Persistente: Especialmente en mujeres postmenopáusicas, ya que podría ser un signo de una lesión premaligna.
- Dolor: Durante las relaciones sexuales o al tocar la vulva.
- Cambios Inusuales: En el color, textura o cualquier otro aspecto de la vulva.
Cada vulva es única y bella en su diversidad. No te dejes influenciar por estereotipos irreales. Conoce tu cuerpo, realiza autoexámenes regulares y consulta a un profesional si notas algo inusual. La información y el cuidado adecuado son clave para mantener una vulva saludable. Comparte este artículo y continúa la conversación.